¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión?

Que la gente se emocione con mis platos… Es lo que hace que esta profesión merezca la pena. No hay una sensación igual.

¿Alguna experiencia para recordar?

No sabría por dónde empezar… Recuerdo que una vez en el mercado un señor me preguntó:

– ¿Tú eres tú?

Yo le dije que sí y él se giró y le dijo a su acompañante:

– ¿Lo ves? ¡Te lo había dicho!

Y se marcharon sin más… La verdad es que me estuve riendo un rato.

¿Qué consejos darías a alguien que estuviera empezando en este mundo?

Lo más importante es que encuentre su camino. Tiene que estudiar, ver y probar todo tipo de cocinas, y luego emplear lo que aprenda en sacar el máximo partido al estilo de cocina en el que crea y con el que se sienta cómodo.

¿Cuál es tu plato favorito?

Me gustan muchas cosas… Un pan muy bien tostado, las verduras, unas buenas espinacas a la crema con mucha pimienta…

Si pudieras degustar solo un tipo de comida o un sabor ¿Cuál sería?

El aceite de oliva… Es mi ingrediente preferido.

Si pudieras ir únicamente a un restaurante ¿A cuál irías?

A la barra del Piripi en Alicante

¿Qué productos consideras indispensables en tus platos?

Los protagonistas más habituales de mi carta son los productos de mercado como pescados y mariscos. Mi cocina está plagada de un aire mediterráneo con el que trato de ensalzar la materia prima.

¿Qué tipo de cocina te apasiona?

Una cocina debe tener personalidad y, en el caso de La Finca, trato de que esta personalidad vaya ligada a la cultura y tradición de Elche y del Mediterráneo. Para mí es prioritario cocinar con lo que me rodea, divulgando y defendiendo todo aquello que, por algún motivo, enriquezca nuestra cocina.

¿Qué plato no incluirías nunca en tu menú?

Creo que ningún ingrediente debe mandarse al “exilio”, si bien es cierto que por mis gustos personales no suelo trabajar la casquería.